¿Por qué desearía haber recibido antes los implantes cocleares?

Mi historia

Mis IC permitieron que recuperara mi vida cuando ni siquiera sabía que la había perdido.

Antes de recibir mi IC, estaba cayendo poco a poco en una vida de aislamiento. Decidí no asistir a reuniones familiares y no salir con mis amigos porque no podía escuchar lo suficientemente bien como para participar plenamente. Al final, solo interactuaba con las personas en quienes confiaba. También se vio afectado mi rendimiento en el trabajo y me preocupaba perderlo.
Sin embargo, los aspectos desconocidos de un IC parecían abrumadores y esto hizo que no considerara obtener uno durante años. No sabía si las ventajas de recibir un IC serían suficientes para superar los posibles riesgos.

Finalmente, tenía tantas dificultades cada día que me di cuenta de que debía hacer algo al respecto. Cuando investigué, con el apoyo y aliento de mis amistades y familiares, finalmente decidí que un IC era el mejor camino para recuperar mi vida.

La cirugía

Para recibir un IC, se necesita realizar un procedimiento quirúrgico menor con anestesia general. Durante la cirugía, afeitaron parte de mi cabello alrededor de la zona de la cirugía. Sin embargo, he aprendido que esta parte del procedimiento ha cambiado bastante desde los inicios de la implantación coclear. Actualmente, la mayoría de los cirujanos no afeitan el cabello. El lugar de la incisión es pequeño y apenas se nota después.

Tras la cirugía, los efectos secundarios más frecuentes que se pueden presentar son la pérdida parcial del sentido del gusto, mareos o dolores de cabeza, o entumecimiento de la lengua o el oído. Estos efectos secundarios generalmente son temporales.

Audición con un implante coclear por primera vez

Si desea comprender mejor qué pasa con el nervio auditivo después de recibir el IC, piense en esta analogía: Imagine que despierta a la mitad de la noche. Todo está muy oscuro, así que enciende una lámpara. Parpadea y entrecierra los ojos porque la luz es muy brillante. Después de un cierto tiempo, los ojos se adaptarán a la luz y podrá ver bien.

Cuando el IC se enciende por primera vez después de la cirugía, el nervio auditivo recibe la estimulación que no ha recibido durante mucho tiempo, así pasa con los ojos cuando enciende una lámpara con luz brillante durante la noche. El nervio auditivo y el cerebro están abrumados y necesitan tiempo para adaptarse hasta que se acostumbren al nuevo nivel de estimulación.

Este es el motivo porque el que toma tiempo volver a oír y entender los sonidos. Sin embargo, tenga la seguridad de que la transición a la audición con el IC será muy satisfactoria. Por lo tanto, tómese el tiempo y esfuércese para que su cerebro vuelva a aprender a oír. Recibirá mucho apoyo en su camino de regreso a la audición.
No estará solo en este proceso, ya que contará con un equipo de profesionales de la salud auditiva, aprenderá de otras personas que han atravesado el mismo proceso y consultará herramientas gratuitas de capacitación en línea.

Los implantes cocleares cambiaron mi vida

Con el tiempo, varias personas con un implante informan que escuchan de nuevo en un rango normal, o casi normal. Incluso, su habla puede cambiar debido a que pueden escuchar más sonidos del habla, y así ajustar su habla para que sea más clara.

Esa también fue mi experiencia. Ahora que tengo mis IC, tengo conversaciones detalladas con mis amistades y familiares en una variedad de entornos. Asisto a eventos y fiestas de cumpleaños. Hablo por teléfono sosteniéndolo y manteniéndolo a la altura de mi oído en lugar de depender de videollamadas o de un teléfono con subtítulos. Mis niveles de frustración se han reducido y tengo más confianza.

Me sorprenden las cosas que escucho ahora y que no pude escuchar durante un largo tiempo. Las voces a distancia, las aves, las voces de los niños, el agua que corre y los autos que vienen tras de mí son algunos de los sonidos que más puedo apreciar.

La relación con mi familia también ha mejorado, ya que ya no tienen que hacer esfuerzos para que entienda lo que dicen. Antes de recibir mi IC, tenían que ayudarme en todo momento para completar las partes que no escuchaba en la conversación porque notaban mi confusión. En la actualidad, puedo comunicarme con más claridad por mi propia cuenta y entender más conversaciones en entornos ruidosos. No me siento tan cansado como me sentía por escuchar en el trabajo, el teléfono o durante el almuerzo de trabajo, así que ahora tengo más paciencia con mi familia y mis seres queridos. El implante coclear ha sido una decisión que cambió nuestras vidas de muchas formas positivas.

Para mí, las ventajas de un IC superan los riesgos ampliamente. Cuando pienso en el año que pasé aprendiendo a escuchar de nuevo con mi IC y la calidad de vida que tengo ahora, sé que tomé la decisión correcta. Los IC cambiaron mi mundo.